La desesperación del Gobernador ante las pocas probabilidades de recuperar recursos del presupuesto.

El Gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez, después de meses de no dar entrevista a los reporteros, salvo escasamente un par de ocasiones más por las circunstancias que por atención a la prensa; este martes decidió hablar; sin embargo, muestra su desesperación en el tema de los recortes que diputados morenistas hicieron al presupuesto de egresos 2019; y ante lo cual por un lado presume que ha habido diálogo y comunicación «fructífera» derivado de sus observaciones al presupuesto avalado por los diputados, pero por el otro manifestó que está en espera de que se llegue a puntos de acuerdo en el tema, es decir aún no hay acuerdos al respecto.

Y es que con declaraciones y comunicados el gobernador intenta de última hora posicionar un discurso, por una parte, de que su exigencia de que los legisladores tomen en cuenta las observaciones hechas a las modificaciones que los legisladores hicieron a su propuesta de presupuesto; pero por el otro no quiere afectar su relación de aparente respeto con el congreso local que no sólo le está rasurado los recursos para 2019; sino también sus facultades en el uso de los mismos.

El hecho es que con dicho recorte a su propuesta de presupuesto de egresos, le pegaron donde más duele, en el bolsillo; y menciono a él aunque es a él y a varios de los integrantes de su gabinete a quienes dicho recorte afectará en forma directa.

Y es que si las mayores afectaciones son para los ciudadanos tlaxcaltecas con dichos recortes; ya de por sí en malas condiciones porque de los recursos que se le han destinado en los últimos años muy poco llega a la población, y mucho se queda en el camino.

Y la muestra está por ejemplo en los escándalos financieros que han involucrado por ejemplo a la Uset; al Sepuede, a la Universidad Politécnica y al Cecyte; dependencias, entre otras, que vale la pena revisar sus finanzas.

Aunque todo parece indicar que los diputados morenistas mayoría en el Congreso local están más ocupados en quitarle recursos al Ejecutivo y auto asignárselos para actividades de supuesta gestión cuando su labor es legislar y no andar pavoneándose en los municipios como si fueran gobernadorcitos.

El asunto es que de seguir así las cosas, en este 2019 podríamos ver a un Gobernador debilitado en cuanto a recursos públicos, a unos diputados con mayores facultades y con mucho dinero, y a un pueblo tlaxcalteca con menores recursos.

Y lo cual significa que pese a lo que López Obrador criticó mucho en campaña que fue el pueblo pobre y gobierno rico… como vemos ahora en el caso de Tlaxcala puede ser: pueblo cada vez más pobre y diputados cada vez más ricos.

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