Obra y calidad de vida.
Por Daniel Cantó
Tlaxcala; Tlax., a 16 de septiembre de 2022
La rehabilitación de las vías de comunicación puede no parecer importante para los fatalistas, para aquellos que quieren ver al gobierno estatal desgastado, pero para quienes hacen uso de ellas, representa una mejor calidad de vida y el acceso a más y mejores servicios.
Lo anterior sale a colación porque en los últimos días, la gobernadora ha presentado la construcción de guarniciones y pavimento con adoquín, agua potable y alcantarillado sanitario en Tzompantepec, de una unidad deportiva en Tepetitla, la rehabilitación parque municipal de Santa Ana Nopalucan, y la rehabilitación de dos carreteras con acceso a Papalotla.
Se trata de inversiones millonarias que tienen como finalidad dar atención a la infraestructura en nuestro estado que derivado de la ampliación y modernización de la carretera Tlaxcala-Apizaco, quedaron en el olvido. Pareciera que, en el gobierno anterior, se apostó completamente a un solo proyecto que, por cierto, tiene sus claroscuros.
Si bien las carreteras ya existían, éstas habían dejado de tener el mantenimiento que les permitiera seguir siendo funcionales pese a la deficiente calidad con la que fueron construidas inicialmente; de ahí que la importancia de darles mantenimiento correctivo y preventivo es fundamental para conservarlas.
Por cuanto hace a la construcción de guarniciones y pavimento con adoquín, agua potable y alcantarillado sanitario en Tzompantepec y la unidad deportiva en Tepetitla, es importante reconocer que se esperan sean obras de calidad, a las que también se les de mantenimiento y evitar gastar doble.
Mientras tanto, la Secretaría de Infraestructura deberá pensar en que son muchas las necesidades en el estado y deberán priorizar aquellas que sean más urgentes y que signifiquen un beneficio para muchas comunidades.
