¿Cuál es la diferencia?
Luego de difundirse un video publicado en un canal de YouTube que revelaría la entrega de supuestos sobornos del gobierno del entonces presidente Enrique Peña Nieto a legisladores; y donde según se ha identificado, un supuesto funcionario de Petróleos Mexicanos (Pemex) entrega las bolsas con el dinero a dos empleados del Senado. Ambos estarían vinculados a políticos del Partido Acción Nacional (PAN); ha venido inmediatamente a la mente la escena en que entonces funcionarios de la capital del país del entonces gobierno de AMLO recibían fajos de billetes producto de la corrupción.
La escena en la que en 2004 aparecieron el entonces operador político, René Bejarano y Gustavo Ponce, entonces Secretario de Finanzas del Jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, ha pasado a la historia como un sello de la corrupción en el gobierno.
Ante este contexto para muchos hay diferencias entre estas dos situaciones; claro que lo que han buscado tanto panistas como lopezobradoristas es irse deslindando de esos hechos; sin embargo parece que poco pueden hacer.
Aquí lo que habrá que conocer es exactamente lo que sucedió en el caso reciente donde se involucra a personajes vinculados con el PAN en un presunto soborno que salpicaría a legisladores del blanquiazul; sin embargo nada de esto se puede confirmar aún; ya que tendrá que investigarse todo lo referente a este video y se puedan evidenciar todos los involucrados en los hechos e identificar cuál es el trasfondo de ese dinero.
En el caso del video donde funcionarios de López Obrador cuando fue Jefe de Gobierno recibiendo dinero en forma ilícita, sí fue corroborado en su momento como una actividad delictiva lo que derivó en procesos judiciales contra Bejarano y Ponce; aunque René Bejarano hoy libre sigue colaborando con Andrés Manuel López Obrador.
Más allá de todas las diferencias que se puedan encontrar en ambos video escándalos, el hecho es que en ambos casos se muestra la debilidad de muchos políticos por el enriquecimiento ilícito a costa de cargos de gobierno que utilizan para su propio beneficio.
De cualquier manera, antes y ahora las cosas parecen no haber cambiado, y donde lo que se muestra en la política es que siguen habiendo personas al interior de los gobiernos que usan sus puestos para delinquir; en palabras del presidente “la mafia del poder” de la que su propio gobierno no ha sido ajeno.