¿Por qué el Gobierno de López Obrador quitó el Internet a la UNAM y a otras universidades?
Luego que el Gobierno de López Obrador a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), decidió sin más ni más, no renovar definitiva o temporalmente, el contrato de internet que daba servicio a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); así como a otras universidades del país; ha quedado la duda sobre el ¿por qué? de está abrupta decisión de interrumpir el servicio, y de qué va a pasar con los contratos al respecto.
Ante esto no surge, sino la incertidumbre de qué es lo que está pasando por la cabeza del presidente de la República -aunque de pronto empieza a degenerarse la palabra “República”, y hacerse más difícil su aplicación a México por los cambios arbitrarios que está sufriendo la forma de gobierno desde el propio gobierno-; por lo que queda sólo analizar el contexto de lo que ha estado ocurriendo sobre las decisiones que está tomando.
El contexto más palpable es el recorte a raja tabla al presupuesto en general, sin importar las afectaciones a la salud, la educación, los programas sociales, en fin, recortes a todo con el pretexto del combate a la corrupción y el cual sólo parece existir en el discurso.
Y donde ha surgido otra duda que poco a poco va teniendo diferentes respuestas que no son del todo claras sobre a dónde se está fugando el multimillonario “ahorro” que más bien es subejercicio que está imponiendo el presidente Obrador, y que está teniendo múltiples afectaciones para diferentes sectores del país, y que no precisamente son sectores conservadores.
Ese dinero que se está recortando a la salud, la educación, la investigación -parte de esto el servicio de internet en la UNAM y otras universidades-, la cultura; así como programas sociales, la obra pública, la construcción de hospitales, universidades, escuelas en general, puentes, carreteras, plantas de tratamiento de aguas residuales, y prácticamente todo lo que significa desarrollo y mejores condiciones de vida de un país; ahora se está aplicando en la centralización del poder del gobierno de la llamada “Cuarta Transformación”, aunque aún no queda claro el plan de este gobierno.
En otro contexto, está que dichos recursos serán utilizados en las magnas obras del gobierno obradorista: “El tren maya, el aeropuerto de Santa Lucía y la refinería de Dos Bocas”, las cuáles están saliendo más caras que como se señaló inicialmente debido a la falta de planeación; pero aun con esto el subejercicio multimillonario de recursos que mantiene Andrés Manuel López Obrador puede estar muy por encima del costo de estas obras; por lo que sigue sin justificarse tanto recorte; aun tomándose en cuanta los apoyos económicos a los “ninis”, entre otros que está otorgando.
Y otro contexto es que está prácticamente regalando recursos del país a otros países de Centro América para supuestamente incentivar el empleo; y lo cual ha sido muy criticado por las enormes necesidades y problemática que hay en México; así como las afectaciones a muchos mexicanos por los recortes que ha hecho al presupuesto; y en lugar de aplicar los recursos del país para atender estas necesidades urgentes, a título personal se está anunciando que continuará dando recursos de México a otros países.
Hoy por hoy, a ocho meses del gobierno de la “Cuarta Transformación”, lo cierto es que analistas y expertos no ven ninguna claridad en las pretenciones reales de Andrés Manuel López Obrador a partir de las políticas que ha estado imponiendo.
Ante esto, una posible respuesta de ¿por qué el Gobierno de López Obrador dejó sin servicio de internet a la UNAM y otras universidades; así como las afectaciones por el gigantesco recorte presupuestal?, podría ser por su falta de preparación para gobernar el país, y su necedad para escuchar a gente preparada que sí tiene la idea para administrar coherentemente los recursos de México.
La otra explicación podría obedecer al preámbulo de una desorganizada dictadura; aunque al parecer la respuesta es la primera, de cualquier manera en ambas circunstancias, la situación para México no se ve mejor que antes donde las cosas ya estaban muy mal.